Miedo a la velocidad del tiempo.

Solo falta una semana de clases. Una semana que quiero que sea Genial, que de hecho haré lo Posible para que sea así. Fueron 9 meses compartiendo una nueva etapa, llena de nuevos retos, nuevas caras, nuevas personalidades por conocer, vivencias, desepciones, peleas, momentos de unión, tristezas, felicidades, aprendizaje. Sin duda, un año en que la nostalgia de años pasados aparece, y nos hace saber que muy pronto se agregaran nuevos recuerdos a nuestro baúl. El deseo de retroceder esos momentos ya pasados, o de retroceder un año más, para volver a vivir otra vez lo mismo de este año,se hace intento. Sin duda, fue una etapa donde aprendí más, mostré más de lo que soy, compartí más con mis amigas, fortalecí amistades, quise ser importante para otros alegrándoles el día. En fin, el tiempo pasa, las horas, los minutos y segundos, transformándose en días, que luego son semana, meses y años. Es bueno vivir nuevas etapas, pero no le quita lo dificultoso, que es dejar atrás las bellas experiencias, personas, palabras, días, momentos, miradas, que se tuvieron. Como si todo lo que vivimos, se apega a nosotros, y no se quiere soltar. Se hace difícil aceptar la realidad, por lo tanto la negamos. Saber que pronto, seremos adultos, y formaremos una vida por nosotros mismos, parece complicado, y más cuando nos sentimos tan diminutos en la sociedad. Peor sería no recordar, pero tenemos esa opción, así que toca vivir, disfrutar, y aprender. La vida es hermosa, y cada una de sus etapas dejan algo muy preciado en nuestro ser. Ya veo la importancia, de vivir día día al máximo, de reír, de hacer felices a los demás, de no dejar nada para después,de romper algunas reglas si es necesario, de amar, compartir. Oye tiempo, te molestaría, si este último año escolar pasas lentamente? Crecí y hasta ahora comienzo a notarlo.